
Las mediciones, publicadas en la revista "Proceedings", revelan que a un animal del tamaño de un conejo le lleva 5 millones de generaciones alcanzar las dimensiones de un elefante, mientras que a uno como ratón le exige 25 millones de generaciones.
Una de las sorpresas del estudio ha sido que los mamíferos marinos crecen dos veces más rápido que los terrestres, probablemente debido a que es más fácil ser grande en el agua porque te ayuda a soportar el peso".
Pero la más sorprendente de las conclusiones ha sido que se decrece con mucha más rapidez que se crece: diez veces más rápido.
Ilustración de Alistair Evans, David Jones y coautores del estudio.
ABC
El Correo.com
1 comentario:
A mi me gustaría saber hasta donde podría llegar un Homo sapiens de alto teniendo en cuenta nuestras limitaciones anatómicas...
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