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lunes, 8 de septiembre de 2014

Descubierta una nueva especie de dinosaurio titanosaurio en Tanzania.

Paleontólogos de la Universidad de Ohio (Estados Unidos) han descubierto en Tanzania los fósiles de una nueva especie de dinosaurio y lo han bautizado con el nombre de Rukwatitan bisepultus. Este animal vivió hace 100 millones de años, era herbívoro, sus piernas medían dos metros y pesaba tanto como varios elefantes juntos.

Esta nueva especie pertenece al grupo de los titanosaurios y es uno de los cuatro dinosaurios de este tipo encontrados en África, hasta la fecha.

El dinosaurio tenía muchas similitudes en la estructura ósea al titanosaurio africano Malawisaurus dixeyi que fue descubierto en Malawi. Pero los dos dinosaurios africanos del sur son muy diferentes el uno del otro, y sobre todo de los titanosaurios encontrados en el norte del continente.

Los investigadores proponen que las diferencias en el tamaño y la estructura del cuerpo entre los titanosaurios africanos pudieron haber sido debidos a las características ambientales (como desiertos, grandes curso de agua o cadenas montañosas) que limitaban el movimiento a través de largas distancias y favorecieron la evolución de las faunas regionalmente diferneciadas.

Los fósiles de esta nueva especie se han encontrado en una pared de roca en la cuenca del Rift, en el suroeste de Tanzania y el equipo estadounidense ha logrado recuperar vértebras, extremidades y huesos de la pelvis en un buen estado de conservación, según se publica en el "Journal of Vertebrate Paleontology".

Ilustración de Mark Witton
Examiner

jueves, 20 de marzo de 2014

Anzu wiliei, un nuevo dinosaurio con plumas encontrado en Norteamérica.

Científicos han hallado los fósiles de una nueva especie de dinosaurio, al que han llamado Anzu wiliei ("pollo del infierno"). El animal pesaba unos 225 kilogramos, tenía una longitud de hasta 3,35 metros, poseía unas afiladas garras y vivió en Norteamérica hace unos 66 millones de años.

La investigación científica se ha publicado hoy en Public Library of Sciences (PLoS). Según, Emmma Schachner, coatura del estudio era un animal de rapiña gigante con la cabeza como la de un pollo y presumiblemente con plumas.

Los científicos hallaron tres esqueletos parciales del dinosaurio -que conforman casi un esqueleto completo- durante una excavación en el nivel superior de la formación rocosa Hell Creek, en Dakota del Norte y Dakota del Sur.

Describen al Anzu como el mayor oviraptosaurio hallado en América del Norte. El término significa, literalmente un saurio que roba huevos, y designa a un grupo de dinosaurios estrechamente vinculados con las aves. Además, el animal prehistórico Anzu es uno de los oviraptosaurios más jóvenes conocidos, es decir, que vivió muy cerca del período de extinción de los grandes dinosaurios.

Los científicos creen que el Anzu tenía garras largas y afiladas, y era omnívoro, y que principalmente comía vegetación, animales pequeños y los huevos de otros animales.

La información 

jueves, 12 de diciembre de 2013

Los dinosaurios pico de pato tenían crestas carnosas como las de los gallos.

Un extraño ejemplar de dinosaurio de la especie Edmontosaurus regalis descrito en la revista Current Biology muestra por primera vez que estos dinosaurios estaban coronados con una peineta carnosa, muy similar a la cresta roja de los gallos.
 
Según, Phil Bell, uno de los investigadores de la Universidad de Nueva Inglaterra (Australia), este hallazgo altera radicalmente la percepción de la apariencia y comportamiento de este grupo y también plantea la posibilidad de que otros dinosaurios tuviera crestas similares.
 
El dinosaurio fue hallado en yacimientos de Alberta (Canadá) y en las partes de su cuerpo momificadas aparecieron impresiones de la piel que indicaban que tenía algo realmente increíble. Las crestas óseas evolucionaron en múltiples formas en los dinosaurios, pero la de este ejemplar es única y se desarrolló independiente a las de otros hadrosaurios.

El hallazgo es espectacular ya que los tejidos blandos, como la piel o los músculos, no suelen conservarse ya que se deterioran rápidamente después de la muerte del dinosaurio. Probablemente, este animal murió cerca de un banco de arena de río, que junto a ciertas bacterias consiguieron preservarlo. El espécimen conserva las tres dimensiones y muestra las estructuras dérmicas, como la piel y la cresta.

Los científicos no tienen claro para qué exactamente utilizaban el apéndice los dinosaurios pico de pato, pero una hipótesis es que podrían haber servido, al igual que en los gallos y algunas otras aves, para atraer a las hembras.
 
Ilustración Julio Csotonyl

lunes, 19 de agosto de 2013

Paleontólogos descubren tres cráneos de pingüinos gigantes en la Antártida.


Durante el Eoceno, hubo pingüinos gigantes en la Antártida, que podían superar hasta los dos metros de altura. Este hallazgo realizado por científicos del CONICET (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina) permitió revelar que sus picos eran muy alargados y que se alimentaban principalmente de peces.

Los fósiles se encontraron en la Península Antártica, cerca de la base Marambio, durante las campañas de excavaciones de verano de 2012 y 2013.

Hasta ahora no se conocía en detalle la anatomía craneal de los pingüinos antárticos del Eoceno y según los investigadores gracias a estos fósiles se podrá interpretar incluso sus hábitos alimentarios.

Los cráneos representan una de las partes más frágiles en el esqueleto de los pingüinos, por lo que es complicado que se preserven durante millones de años.

Aunque a estos fósiles les falta el pico, se puede estimar que eran largos y delgados. Hay parámetros morfológicos que sugieren que se trataba de pingüinos robustos, con músculos muy desarrollados en la parte posterior de la cabeza y en el cuello, y que además tenían picos prolongados, una característica que se relaciona con una dieta basada en el consumo de peces.

Además, el tener tres ejemplares permite compararlos entre sí y reconocer el grado de evolución que habían alcanzado estas aves hace 35 millones de años. Así también, permite identificar las adaptaciones que aún no se habían desarrollado y debieron surgir con posterioridad.

La comparación en detalle de las estructuras craneales permite entender que se trata de al menos dos especies distintas y según revela el estudio, los crustáceos no habrían sido el producto predilecto de su dieta, de acuerdo a la configuración de las cavidades donde se aloja la glándula que excreta el exceso de sal consumida.

viernes, 16 de agosto de 2013

Descubren en China al antepasado más antiguo de los mamíferos multituberculados.

Paleontólogos chinos y estadounidenses han hallado en China un fósil de hace 160 millones de años perteneciente a una nueva especie de roedor extinto, al que han denominado como Rugosodon eurasiaticus, que representaría el antepasado más antiguo de los mamíferos multituberculados. El animal pudo haber sentado las bases para la vida en los árboles y la dieta de los mamíferos herbívoros que vinieron después.
 
Los multituberculados son un orden extinto de mamíferos ancestrales de los cuales se conocen más de 200 especies fósiles, todas ellas datadas entre el Jurásico medio y el Oligoceno temprano. El fósil descubierto indica que medía 17 centímetros y era el antepasado más antiguo de este orden de costumbres arborícolas.
 
El esqueleto proporciona valiosa información sobre las características que ayudaron a estos multituberculados a prosperar. Por ejemplo, el fósil revela que sus dientes se adaptaban tanto para roer plantas como a comer animales. Los científicos sugieren que el animal allanó el camino para que otros mamíferos posteriores se hicieran herbívoros y arborícolas.
 
Según los científicos, los multituberculados que se adaptaron para escalar árboles y saltar tenían unos huesos del tobillo capaces de conseguir una “hiper-rotación hacia atrás” de las patas traseras. Lo sorprendente es que estas características del tobillo ya estaban presentes en los mamíferos Rugosodon que vivían en tierra, cuando es propio de arborícolas o en aquellos que transitan por superficies irregulares.
 
Además, el roedor podía comer sin problemas diferentes tipos de alimentos, probablemente consumieron una dieta de animales durante la mayor parte de su existencia, pero que en su última etapa la diversificaron y empezaron a comer plantas.
 
Antes de que los multituberculados desaparecieran, compitieron con los roedores más modernos. Al final de su carrera en el planeta, habían desarrollado dentaduras complejas que les permitieron disfrutar de las dietas vegetarianas y habilidades locomotoras únicas que les permitieron desplazarse por las copas de los árboles.

La investigación sobre el Rugosodon eurasiaticus ha sido publicada en la revista "Science".
 

jueves, 25 de julio de 2013

Descubren un fósil de pez de hace 90 millones de años, en México.

Hoy, científicos mexicanos han anunciado el hallazgo en el estado de Chiapas (México) de un fósil de un pez que vivió hace unos 90 millones de años. El fósil, identificado como de un nuevo género, ha sido nombrado como Sapperichthys chiapanensis, en honor a Karl Theodor Sapper, naturalista y topógrafo alemán, pionero en la descripción de la geología y paleontología de Chiapas.

El pez pertenece a la familia de los Gonorhychidae del orden de los Gonorynchiformes, pero por sus características constituye un nuevo género y una nueva especie para la ciencia. El Sapperichthys chiapanensis habitó las aguas en la era Mesozoica cuando abundaban en la tierra los dinosaurios y Chiapas tenía una parte de su territorio sumergido en un mar profundo.

El fósil mide de 15 a 20 centímetros de largo, carece de aleta caudal y su opérculo (aleta que cubre y protege a las branquias) es redondeado. En su borde posterior presenta una serie de espinas similares a las de la especie Charitopsis spinosus del mismo orden localizada en el Líbano.

Durante casi 20 años se han acumulado hallazgos que han permitido formar una colección científica de más de 250 peces óseos fósiles, de los cuales se han identificado 15 especies diferentes, provenientes de yacimientos del Cretácico tardío, de los municipios de Ocozocoautla, Palenque y San Cristóbal de las Casas.

El fósil se encuentra expuesto en el museo de Paleontología Eliseo Palacios Aguilera en Tuxtla Gutiérrez, en Chiapas.

La Información

miércoles, 17 de julio de 2013

Hallan un nuevo dinosaurio con una gran nariz y enormes cuernos: Nasutoceratops titusi.

Investigadores de la Universidad de Utah (Estados Unidos) han descubierto una nueva especie de dinosaurio de la familia de los triceratops, de unos 5 metros de largo y 2,5 toneladas de peso. El animal ha sido nombrado como Nasutoceratops titusi ("narigón de cara cornuda") ya que poseía una enorme nariz y cuernos excepcionalmente largos.

Según los paleontólogos que lo han estudiado el animal tenía unas características insólitas para pertenecer a ese grupo de dinosaurios.

El dinosaurio fue descubierto en 2006 en una zona que es una auténtica mina para encontrar fósiles y ahora se publica su detallado análisis en la revista 'Proceedings of the Royal Society B'. En la investigación se estima que los fósiles datan de hace unos 76 millones de años aproximadamente, lo que indica que vivió durante el período Cretácico.

Los cuernos del Nasutoceratops titusi, que se curvan hacia delante y hacia los lados, serían los más grandes de entre el grupo de los triceratops y además el animal sería el dinosaurio de su grupo con la nariz más grande.

El impresionante cráneo del nuevo dinosaurio se expondrá de manera permanente en el Museo de Historia Natural de Utah.
Ilustración Lukas Pazarin
El Mundo
El País

El Overosaurus paradasorum, una nueva especie de dinosaurio titanosaurio de Argentina.

Una nueva especie de dinosaurio saurópodo se suma a los descubrimientos paleontológicos en la provincia de Neuquén (Argentina): el Overosaurus paradasorum. Los fósiles de este dinosaurio titanosaurio, de hace unos 80 millones de años, fueron descubiertos 50 kilómetros al suroeste de Rincón de los Sauces, en la formación geológica Anacleto.

El paleontólogo Rodolfo Coria, primer firmante del artículo científico, asegura que el ejemplar está muy bien conservado, habiéndose preservado la columna vertebral articulada desde la base del cuello hasta la mitad de la cola, incluyendo sus costillas y elementos de la cadera. La investigación científica sobre esta nueva especie  ha sido publicado por Rodolfo Coria, Leonardo Filippi, Luis Chiappe, Rodolfo García y Andrea Arcuccila en la revista Zootaxa.

El Overosaurus es un integrante de una variada fauna de titanosaurios representada por varias especies diferentes, muchas de las cuales fueron halladas en las inmediaciones de Rincón de los Sauces. El esqueleto del Overosaurus fue totalmente preparado para su posterior estudio en el Museo Argentino Urquiza.

El Overosaurus es un dinosaurio del grupo de los titanosaurios, grandes herbívoros que dominaban la Patagonia hace 80 millones de años. Como rasgo distintivo, esta nueva especie tenía un tamaño relativamente pequeño. Se estima que midió unos 15 metros de largo, lo que contrasta con otras especies descubiertas en la zona que superaban los 25 metros o incluso más de 30 como el Argentinosaurus huinculensis.

Telam
 

martes, 16 de julio de 2013

Nueva investigación revela que el dinosaurio Tiranosaurio rex era un cazador y no sólo un simple carroñero.

El debate sobre si el Tiranosaurio rex era un temible depredador o un simple carroñero es tan antiguo como su descubrimiento. Ahora, paleontólogos estadounidenses de la Universidad de Kansas (EE.UU) confirman que este dinosaurio cazaba a sus presas vivas, tal y como se publica en Proceedings of National Academy of Sciences (PNAS).

Los investigadores han analizado un fósil descubierto en Dakota del Sur, consistente en unas vértebras fusionadas de hadrosaurio que envuelven un diente roto de T. rex, de unos 3,75 centímetros de largo. La corona dental incrustada en la columna vertebral del hadrosaurio indica que el carnívoro cazaba a sus presas vivas, aunque también pudiera tener un comportamiento carroñero, como la mayoría de los grandes depredadores modernos, incluidos los leones. Que en este caso la presa lograra escapar no significa que fuera un cazador poco hábil, ya que hasta los leones fallan entre el 42% y el 62% de sus ataques.

Aunque no existe ningún ejemplo actual en el que un depredador de semejante tamaño sea carroñero, muchos expertos, como Jack Horner, paleontólogo del Museo de las Rocosas en Bozeman (Montana, EEUU) defendían que Tiranosaurio rex era demasiado lento para cazar, y que su fino olfato era propio de carroñeros. Jack Horner no está muy convencido de las conclusiones de esta investigación y cree que este estudio no refuta su teoría según la cual el Tiranosaurio rex era un carnívoro oportunista como la hiena. Piensa que la investigación simplemente muestra que un tiranosaurio mordió a otro dinosaurio.

Estudios más recientes aseguran que su olfato no era tan desarrollado, que podía alcanzar los 40 km/h y que la fuerza de su mordisco era más fuerte que la de cualquier otro depredador terrestre. Todo ello, sumado al estudio publicado hoy en PNAS, puede mostrar que el dinosaurio era capaz de perseguir y cazar a sus presas.

Referencia bibliográfica:
Robert A. DePalma II, David A. Burnham, Larry D. Martin, Bruce M. Rothschild, and Peter L. Larson. “Physical evidence of predatory behavior in Tyrannosaurus rex”. PNAS Early Edition July 2013

Agencia SINC

martes, 9 de julio de 2013

Tataouinea hannibalis, un dinosaurio con un sistema respiratorio parecido al de las aves.

Investigadores de la Universidad de Bolonia han descubierto una nueva especie de dinosaurio saurópodo, de la familia Rebbachisauridae. al que han nombrado Tataouinea hannibalis, que posee un sistema respiratorio muy similar a la de las aves actuales.

En el estudio, publicado en la revista "Nature Communications", se presenta al animal prehistórico como "la primera y mejor conservada" muestra de dinosaurio articulado del norte de África.

Fue descubierto en el sur de Túnez en 2001 y desde 2009 está siendo estudiado por los paleontólogos. En la investigación han detallado que mide unos 14 metros de longitud y su esqueleto era muy ligero en comparación con su tamaño. Esto se debe a que sus huesos eran huecos, igual que los de las aves.

Los científicos han descubierto, por su estructura anatómica, que esta especie comparte con las aves las bolsas de aire que forman su sistema respiratorio. En concreto, son algunas cavidades de los huesos de la cola y de la pelvis los que apoyan la hipótesis de que estos dinosaurios respiraban con el mismo mecanismo avanzado de las aves modernas.

El autor principal del estudio, Federico Fanti, ha señalado que este hallazgo es "uno de los más importantes en el norte de África" y también ha destacado que se trata de la confirmación de que "el sistema de respiración de las aves nació en la época de los dinosaurios".

Ilustración de Davide Bonadonna
Europa Press

Agencia SINC

lunes, 8 de julio de 2013

Descubren en China una pulga fosilizada, Saurophthyrus exquisitus, de hace 125 millones de años.

Científicos de la Universidad de Pekín han descubierto en China el fósil de una nueva especie de pulga, de hace 125 millones de años, a la que han nombrado como Saurophthyrus exquisitus. El estudio, publicado en la revista “Current Biology”, revela que este parásito tenía la boca y el cuerpo más pequeños que las pulgas gigantes, aunque más grandes que las actuales. Esta nueva especie puede explicar la transición de estos animales.
 
El pasado año, el equipo dirigido por Chungkun Shih, de la Universidad de Pekín, descubrió el fósil de pulga más antiguo conocido hasta ahora. Estos parásitos, conocidos como “Pseudopulicidae”, databan de hace 165 millones de años y fueron localizados en el noreste del país. Los insectos tenían hasta dos centímetros de largo, un aparato chupador en forma de sierra, genitales externos, ojos reducidos y antenas cortas.
 
Según explica el investigador chino Shih, las pulgas prehistóricas necesitaban una herramienta especial para cortar a través de la gruesa piel para llegar a la sangre y que el anfitrión no se enterase.
 
Los investigadores estaba trabajando en la misma región de los hallazgos del pasado año cuando descubrieron tres ejemplares de la nueva especie, Sauropthyrus exquisitus. El insecto tiene un centímetro de longitud y el tubo de succión es más pequeño.

Los científicos creen que la configuración corporal estaba dirigida a alimentarse de animales de piel gruesa, así que la perforación de la piel constituía su principal desafío. Los pterosaurios que habitaban la misma región durante ese periodo del Cretácico tenían una piel más fina y sensible que otros animales, como los dinosaurios, así que estos insectos se adaptaron para que sus picaduras fueran menos dolorosas y su presencia más difícil de detectar por el anfitrión.
 
Las cerdas de su cuerpo pudieron ayudar a estas pulgas a aferrarse al animal del que se alimentaban. Y las piernas más largas y los genitales internos quizá permitieron mayor capacidad de salto.
 
El nuevo descubrimiento sugiere que los parásitos evolucionaron al tiempo que sus anfitriones en la manera de chupar la sangre y en las habilidades para esconderse.
 

jueves, 27 de junio de 2013

Encuentran un nuevo equinodermo de hace más de 500 millones de años, en Marruecos.

Una nueva criatura fosilizada, con forma de cigarro que vivió hace unos 520 millones años ha sido descubierto en Marruecos. Según Andrew Smith, coautor de la investigación, el Helicocystis moroccoensis posee características que lo convierten en el equinodermo más primitivo que tiene simetría de cinco puntos.

El primitivo animal, descrito en la revista "Proceedings of the Royal Society B", por Andrew B. Smith y el español Samuel Zamora, podría haber cambiado su forma de cuerpo delgado a rechoncho. Los investigadores creen que es un animal de transición que podría ayudar a explicar cómo los primeros equinodermos se desarrollaron.

Fue en 2012, cuando Smith y sus colegas estaban excavando en sedimentos que datan de hace unos 520 millones de años en las montañas del Anti-Atlas en Marruecos, cuando se descubrieron varios ejemplares del animal fosilizado.


El equinodermo vivió en el antiguo supercontinente llamado Gondwana durante la explosión cámbrica, un período en que la vida en el planeta estaba diversificado considerablemente.


Uno de los equinodermos más antiguos conocidos, Helicoplacus (primero descubierto en las Montañas Blancas de California) tenían el plan corporal espiralado pero asimétrico. Todos los equinodermos modernos comienzan como larvas con simetría bilateral, planteando la cuestión de cómo y cuándo se originó el plan corporal de cinco puntos distintivos de las nuevas criaturas encontradas.

H. moroccoensis poseía un cuerpo cilíndrico que se extendía hasta 4 centímetros de largo. La boca del equinodermo estaba situada en la parte superior de su cuerpo y lucía un cáliz formado por un mosaico de placas. Tenía un esqueleto latticelike hecho de calcita y combinada caracteres de los equinodermos espirales y de los pentaradiados.

 El animal con forma de cigarro era capaz de expandir y contraer esa forma y a veces ser bajo y gordo, y otras largo y delgado.



Livescience

miércoles, 5 de junio de 2013

Descubren uno de los mayores lagartos de la historia y lo nombran en honor a Jim Morrison: Barbaturex morrisoni

Una nueva investigación de un equipo de paleontólogos de la Universidad de Nebraska-Lincoln concluye que los reptiles gigantescos coexistieron con los mamíferos, hace unos 40 millones de años, en bosques tropicales del sudeste de Asia, compitiendo por la alimentación y otros recursos. Estos científicos describen sus hallazgos tras analizar fósiles del lagarto gigante de Myanmar en la revista "Proceedings of the Royal Society B".

El estudio demuestra que es uno de los lagartos más grandes conocidos que ha vivido en la Tierra. Al animal se le ha dado el nombre oficial de Barbaturex morrisoni, en memoria del líder de The Doors, Jim Morrison, apodado el Rey Lagarto. De casi seis metros de largo y un peso de más de 27 kilogramos, el lagarto proporciona nuevas pistas sobre la evolución de los reptiles herbívoros y su relación con el clima global y la competencia con los mamíferos.

En la actualidad, los lagartos herbívoros como iguanas y agámidos son mucho más pequeños que los grandes mamíferos herbívoros. Los lagartos más grandes, como el dragón de Komodo, se limitan a las islas que están a la luz de los depredadores mamíferos, pero no se sabe si los lagartos tienen un tamaño limitado por la competencia con los mamíferos o las temperaturas de climas modernos.

Barbaturex morrisoni vivía en un ecosistema con una gran diversidad de mamíferos, tanto herbívoros como carnívoros durante una época cálida, hace entre 36 y 40 millones de años, cuando no había hielo en los polos y los niveles atmosféricos de dióxido de carbono eran muy altos. La criatura era más grande que la mayoría de los mamíferos con los que vivió, lo que sugiere que la competencia y la depredación por mamíferos no restringían su evolución en una especie gigante.

Los fósiles del lagarto gigante, que se encontraron originalmente Ciochon y sus colegas en la década de 1970 en Myanmar, estuvieron sin estudiar en el Museo de Paleontología de la Universidad de California hasta hace pocos años, cuando Jason Head y Patricia Holroyd comenzaron a analizarlos.

Cuando examinaron la cabeza de los fósiles, se dieron cuenta de que los huesos de la criatura son característicos de un grupo de lagartos modernos que incluyen dragones barbudos, camaleones y herbívoros como los lagartos de cola espinosa, pero de un tamaño considerable.

Además, se percataron de que las crestas en la parte inferior de la mandíbula sugieren que apoyaba los tejidos blandos, al igual que algunos lagartos modernos que les confieren un aspecto barbudo, de ahí el nombre de Barbaturex ("rey barbudo").

A su juicio, el descubrimiento de B. morrisoni lleva a otras grandes preguntas como durante cuánto tiempo llevan persisten en el registro fósil, en qué partes del planeta se dispersaron, la relación entre la evolución del tamaño de los reptiles y la temperatura global de la historia y si un calentamiento del clima podría hacer reaparecer a los reptiles gigantes.
Imágenes de la Universidad Nebraska-Lincoln.
Europa Press

jueves, 30 de mayo de 2013

Descubren una nueva especie de pez marino en Teruel: Machaeracanthus goujeti.

Un equipo de investigación, liderado por la Universidad de Valencia, describe en la revista Geodiversitas una nueva especie de acantodio (Acanthodii), unos peces primitivos que compartían características comunes con los tiburones y con los peces óseos.

Los restos de escamas, espinas y huesos de la articulación escapular de este animal se encontraron en yacimientos del Devónico situados en Teruel y en el sur de Zaragoza.

La investigación incluye además el análisis de otros fósiles correspondientes a una columna fragmentada y a escamas aisladas del Devónico Inferior.

Estos restos, que procedían del norte de España (Palencia y Cordillera Cantábrica) y el oeste de Francia (localidad de Saint-Céneré), habían sido asignados originalmente a la especie Machaeracanthus sp.

Al grupo de peces acantodios se les conoce también por su aspecto como "tiburones espinosos" y solo vivieron durante en el Paleozoico y alcanzaron su máxima diversidad en el Devónico.

Las espinas típicas del grupo Aconthodii tienen un crecimiento diferente al de las espinas encontradas, por lo que este género podría ser aún más parecido a los tiburones y estaría en etapas muy tempranas de la radiación de los vertebrados con mandíbulas articuladas.

La mayoría de los ejemplares encontrados por los paleontólogos son juveniles y gracias a ellos han estimado que esta especie no alcanzarían el metro de longitud.

Por su parte, los fósiles hallados en los sedimentos de la Cordillera Ibérica pertenecerían seguramente a peces que nadaban próximos a la costa.

Los fósiles a partir de los cuales se ha realizado este estudio forman parte de los fondos del Museo Paleontológico de Zaragoza.

miércoles, 29 de mayo de 2013

Descubierta una nueva especie de koala extinto en Australia: Litokoala dicksmithi.

Paleontólogos australianos han descubierto una nueva especie de koala extinto que vivió en las selvas tropicales del norte de Australia, hace alrededor de 20 millones de años. Al animal le han llamado Litokoala dicksmithi, en honor a un famoso empresario, filántropo y explorador australiano llamado Dick Smith.
Según la investigación publicada en "Journal of Systematic Palaentology", el número conocido de especies extintas de koalas es de dieciocho y en la actualidad, sólo una especie (Phascolarctos cinereus) está viva.

Litokoala dicksmithi poseía un tercio del tamaño de los koalas modernos, con un peso de unos tres a cuatro kilogramos. Mientras que otras especies de koalas halladas en la misma zona han sido descritas como "similares a las comadrejas", la nueva especie se parece más a los koalas modernos, tal y como se ha podido estudiar gracias a parte de un cráneo fosilizado "excepcionalmente bien conservado".
Los investigadores manifiestan que el descubrimiento es particularmente importante, ya que es uno de sólo dos especies de koala fósiles que se conocen a partir de material de la preservación de la región facial incluyendo el hocico.

Una característica interesante del cráneo del animal es el gran tamaño de las cuencas de los ojos que sugiere la posibilidad de que estos koalas fueran nocturnos, teniendo una mayor agudeza visual que los koalas modernos.

La aparición de condiciones más secas en Australia, hace unos 15 millones de años, llevó a la contracción de los hábitats de la selva tropical y la aparente extinción de muchas especies de koala incluyendo al Litokoala dicksmithi.

Sci-News

domingo, 26 de mayo de 2013

Un nuevo dinosaurio herbívoro encontrado en Canadá: Albertadromeus syntarsus.

Un nuevo dinosaurio herbívoro ha sido descubierto al sur de Alberta (Canadá) al que han llamado Albertadromeus syntarsus ("corredor de Alberta con los huesos de los pies fusionados). El animal habría pesado unos 16 kilogramos y según los investigadores habría tenido los huesos inferiores de las patas fusionados, lo le habría convertido en un sprinter, equipado para huir de sus depredadores.

Los fósiles del dinosaurio fueron encontrados del grupo de Belly River en Alberta, una formación geológica que data del Cretácico, hace unos 77 millones de años. Los descubridores creen que Albertadromeus podría haber sido el dinosaurio herbívoro más pequeño encontrado en Canadá.

Los científicos piensan que los pequeños dinosaurios eran abundantes, aunque no se han preservado porque sus frágiles huesos a menudo se destruían antes de ser fosilizados, ya hayan sido mordidos por los depredadores o devastados por la erosión. Según el científico Caleb Brown de la Universidad de Toronto, los estudio muestran que estos dinosaurios fueron más abundantes en los ecosistemas de lo que se pensaba hasta ahora.
Los resultados de la investigación fueron detallados, el mes pasado, en el Boletín del Museo Peabody de Historia Natural y publicado en la revista Journal of Vertebrate Paleontology.

Live Science

martes, 21 de mayo de 2013

El dinosaurio Allosaurus poseía un estilo de alimentación más parecido al de un halcón que al de un cocodrilo.

Se cree que el Tyrannosaurus rex podría haber movido su enorme cabeza de lado a lado para desmembrar a su presa, como hacen los cocodrilos y un nuevo estudio muestra que otro dinosaurio emparentado, el Allosaurus, era un cazador más hábil que el T-rex y tiraba de la presa más como lo hace un halcón.

Los análisis de ingeniería muestran que el Allosaurus y el Tiranosaurio eran depredadores que llevaban a cabo diferentes estilos de alimentación.

La nueva investigación, publicada en "Palaeontologia Electronica", fue elaborada por un equipo diverso de científicos de la Universidad de Ohio, incluyendo expertos en ingeniería mecánica, visualización por ordenador y anatomía de dinosaurios.

Estos expertos comenzaron su investigación con un yeso de alta resolución del cráneo de 1,5 metros, más el cuello del dinosaurio Allosauros y exploraron los fósiles con un escáner, obteniendo los datos digitales para manipular en un ordenador.

Después, aplicaron un análisis de ingeniería especializada prestada por robótica llamada dinámica de sistemas multicuerpo, que permitió a los ejecutar simulaciones sofisticadas de la cabeza y los movimientos del cuello de Allosaurus al atacar a sus presas, despojar de la carne a un cadáver o simplemente mirar alrededor.

La estructura anatómica de las aves y cocodrilos actuales, junto con indicios reveladores sobre los huesos de dinosaurios, permitieron construir el cuello y los músculos de la mandíbula, los senos de aire, la tráquea y otros tejidos blandos en un modelo de ordenador en 3D.

Un hallazgo clave fue un músculo del cuello llamado longissimus capitis superficialis, cuyo análisis reveló que el músculo se unía en la parte baja del cráneo, lo que habría causado "ventroflexión de la cabeza seguida por retracción. Es decir, que el animal fue excepcionalmente dotado para impulsar su cabeza hacia abajo, mantenerlo en esa posición y luego tirar de la cabeza hacia arriba y hacia atrás con el cuello y el cuerpo, desgarrando la carne de la canal de la presa, parecido a una pala mecánica o excavadora que arranca la tierra en un terreno.

En el mundo animal, esta misma técnica de descarnar es utilizada por los halcones o los cernícalos, mientras que los T. rex estaban diseñados para utilizar una técnica de desgarro de la carne por sacudidas para obtener trozos, más como un cocodrilo.

Los análisis de ingeniería revelaron una gran inercia rotacional en el estilo de alimentación de T. rex, ya que el gran cráneo óseo y los dientes situados en el extremo del cuello hacían que fuera difícil para ellos acelerar o ralentizar la cabeza o cambiar su curso, por lo que balanceaba su cabeza. Sin embargo, el Allosaurus poseía una cabeza relativamente más ligera, que disminuía la inercia de rotación.

El resultado final es que el Allosaurus era un cazador mucho más flexible que podía mover la cabeza y el cuello alrededor de forma relativamente rápida y con un control considerable, que sin embargo, se produjo a costa de la energía de fuerza bruta, lo que requería un estilo de descarnado que, como un halcón, usa todo el cuello y el cuerpo para despojar la carne de los huesos.

Europa Press

jueves, 16 de mayo de 2013

Nombrado un fósil marino de hace 500 millones de años en honor al actor Johnny Depp.

Un fósil marino de hace 500 millones de años de antigüedad y dotado de unas pinzas en forma de tijeras ha sido bautizado con el nombre del actor estadounidense Johnny Depp, en honor al personaje de "Eduardo Manostijeras".

"Kooteninchela deppi", un lejano antepasado de las langostas y los escorpiones que vivía en aguas poco profundas frente a las costas de la actual Columbia Británica (Canadá), fue identificado por David Legg, un científico británico del Imperial College de Londres admirador de Depp.
 
David Legg considera que "Kooteninchela deppi" era probablemente un animal cazador o carroñero, aunque de pequeño tamaño, de unos 4 centímetros de largo. Las pinzas podrían haber sido utilizadas para capturar a sus presas o para sondear el fondo del mar en busca de comida escondida en los sedimentos marinos. Además, poseía unos grandes ojos compuestos por muchas lentes, parecidos a los de las moscas, que le ayudaban a buscar comida y estar atentos a los depredadores.
 
"Kooteninchela deppi" pertenece a un grupo de artrópodos denominado Megacheira ("grandes manos" en griego antiguo) que dió origen a los escorpiones, ciempiés, insectos y cangrejos actuales.
 
La investigación ha sido publicada en "Journal of Palaeontology".
 
 
 

miércoles, 15 de mayo de 2013

Una nueva especie de ictiosaurio contradice teorías anteriores de la extinción de estos reptiles marinos.

Un equipo internacional de científicos ha analizado fósiles de una nueva especie de ictiosaurio, un reptil marino similar a los delfines de la era de los dinosaurios, que han revolucionado la comprensión de la evolución y la extinción de estos antiguos reptiles marinos. Los resultados contradicen las teorías anteriores de que los ictiosaurios del Cretácito (hace entre 145 y 66 millones de años) fueron los últimos supervivientes de un grupo en declive.

Hasta hace poco, se pensaba que los ictiosaurios se redujeron gradualmente en la diversidad a través de múltiples eventos de extinción durante el período Jurásico y se cree que estos eventos sucesivos han matado a todos los ictiosaurios, excepto los muy adecuados para la vida que son capaces de nadar rápidamente en mar abierto.

Debido a este patrón, se ha asumido que los ictiosaurios estaban en constante y rápida evolución para ser cada vez más rápidos nadadores en aguas abiertas, al parecer, sin "estancamiento" en su larga historia evolutiva, pero los fósiles del ictiosaurio localizado en 1950 en la región iraquí del Kurdistán alteran sustancialmente este punto de vista.

El estudio del esqueleto parcial muy bien conservado se inició durante la década de 1970 con el experto en ictiosaurios Robert Appleby que reconoció que el espécimen era significativo, pero que murió antes de resolver la edad exacta de los fósiles. Así que la continuación del estudio se realizó por una nueva generación de investigadores.

En el nuevo análisis, realizado por investigadores de universidades y museos de Bélgica y Reino Unido, publicado este miércoles en 'Biology Letters', los científicos lo bautizan como Malawania anachronus ("nadador a tiempo"). A pesar de ser del Cretácico, Malawania representa el último miembro conocido de un tipo de ictiosaurio que se creyó durante mucho tiempo que se había extinguido durante el Jurásico temprano, más de 66 millones de años antes.

Cabe destacar que este tipo de ictiosaurio arcaico se caracteriza por un estancamiento evolutivo: no parece haber cambiado mucho entre el Jurásico y el Cretácico, algo muy raro en la evolución de los reptiles marinos.

Gracias a su estudio de las esporas microscópicas y polen conservado en la misma losa de Malawania y a los diversos análisis del árbol genealógico del ictiosaurio, los paleontólogos volvieron sobre la historia evolutiva de los ictiosaurios del Cretácico. De hecho, el equipo fue capaz de demostrar que los numerosos grupos de ictiosaurios que aparecieron durante el Triásico y Jurásico sobrevivieron hasta el Cretácico, lo que significa que la supuesta extinción del Jurásico no se produjo con los ictiosaurios, un hecho que hace que su registro fósil sea muy diferente al de otros grupos de reptiles marinos.

Cuando se ve junto con el descubrimiento de otro ictiosaurio por el mismo equipo en 2012 y nombrado Acamptonectes densus, el descubrimiento de Malawania constituye una "revolución" en la forma en que se había imaginado la evolución del ictiosaurio y su extinción. Ahora parece que los ictiosaurios eran todavía importantes y diversos durante la primera parte del Cretácico y que la extinción definitiva de los ictiosaurios, un evento que ocurrió hace unos 95 millones de años (mucho antes del gran evento de extinción meteorito orientado que terminó el Cretácico), es ahora más confusa que lo previsto anteriormente.

Europa Press

jueves, 9 de mayo de 2013

Identifican cuatro nuevas especies de dinosaurios anquilosaurios, en Canadá.

Se han identificado cuatro nuevas especies de dinosaurios anquilisaurios que abarcan un periodo de aproximadamente 10 millones de años. La investigación, realizada por la estudiante graduada por la Universidad de Alberta, en Canadá, Victoria Arbour y publicada este miércoles en 'Plos One', muestra que tres de estas especies de anquilosaurios vivieron al mismo tiempo, en lo que hoy es Dinosaur Provincial Park, en el sur de Alberta (Canadá).

Arbour visitó colecciones de fósiles de dinosaurios de Alberta para examinar la armadura del cráneo y compararla con los datos principales de los restos fosilizados de anquilosaurios, de forma que resucitó una investigación realizada hace más de 70 años.

En los 70, el trabajo anterior se descartó y las cuatro especies fueron agrupadas en una sola especie llamada Euoplocephalus.

Arbour considera que se abre la puerta a nuevas preguntas: cómo compartieron su hábitat las tres especies que vivieron al mismo timpo, de qué forma se dividieron los recursos alimentarios y cómo lograron sobrevivir. Por ello, esta investigadora también estudiará cómo pequeñas diferencias en la ornamentación del cráneo y la forma de la cola entre las especies influyeron a lo largo del reinado de estos animales en la Tierra.

Europa Press